HISTORIA DE ÉXITO

EXPANDIENDO UN PROGRAMA SOCIAL DE MERCADEO DE CONDONES

Las poblaciones en alto riesgo de contraer VIH/SIDA ya tienen acceso a condones de bajo precio y alta calidad

Reto

Tres años atrás el acceso a condones  asequibles era escaso  para la población vulnerable de la República Dominicana un país donde la prostitución está muy difundida y los prostíbulos se encuentran a través de todo el país.  Los estudios muestran que existen entre 70,000 y 130, 000 trabajadoras sexuales en la República Dominicana.  Esto constituye una población con un alto índice de infección como lo demuestran las altas tasas prevalentes del SIDA (4-13% dependiendo de la provincia).  Proveer educación  y el acceso a protegerse para estas y otras poblaciones vulnerables fue necesario para contrarrestar la rápida expansión del SIDA.

Iniciativas

La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), en la República Dominicana trabajó con  el donatario Population Services international (PSI) para desarrollar un programa de mercadeo social dirigido al uso de condones en escala nacional el cual asegurara un buen precio y condones de buena calidad para las trabajadoras sexuales y sus clientes.  Este programa complementó los cambios de comportamiento ya existentes en las actividades de comunicación ya implementadas por varias Organizaciones locales No-Gubernamentales.  Con un presupuesto limitado y con la meta de distribuir un millón de condones de la marca “PANTE” durante los primeros seis meses, PSI condujo una evaluación  de puestos de venta con miras a la población vulnerable tales como trabajadoras sexuales y sus clientes.  Esta evaluación incluyó una revisión de la infraestructura de las Organizaciones No-Gubernamentales y de la abilidad de facilitar el acceso a los condones a través de los educadores pares, promotores comunitarios y en algunos casos puestos de ventas.

Resultados

Hoy día, todos los condones marca PANTE (un promedio de un millón por mes) se venden a través de las  ONGs.  Estos socios informan a PSI sobre sus ventas y se aseguran que los condones alcancen la población meta.  La sesiones de entrenamiento de Population Services International  con el personal de las ONGs fortalece su capacidad para implementar programas sociales de mercadeo.

Este programa también provee una alternativa al trabajo sexual.  Las trabajadoras sexuales son empleadas y remuneradas con salarios competitivos para empacar los condones.  Esto les permite a muchas de ella dejar la prostitución, ya que ganan suficiente dinero para invertir en pequeños negocios (máquinas de coser, utensilios para un negocio de comida) y poseer una referencia “respetable” para usar cuando aplican a posiciones en el sector formal.   Asimismo, muchas ex-trabajadoras sexuales trabajan como educadoras pares y agentes de ventas.  El German Development Bank, KFW, formó una sociedad con PSI y asumirá el apoyo de este programa cuando se termine la ayuda de la AID.