“El Día de la Libertad Religiosa es una oportunidad
para celebrar nuestro legado que nos hace libres de practicar
nuestra religión, promover una cultura de tolerancia
y paz, y renovar nuestro compromiso para asegurar que todas
las personas en la Tierra puedan disfrutar de estos derechos
humanos fundamentales”, proclamó el presidente
Bush el 13 de enero.
A continuación el texto de la proclama tal como
fue traducido por la Casa Blanca:
(comienza el texto)
La Casa Blanca
Para su publicación inmediata
Oficina del Secretario de Prensa
13 de enero de 2009
Día de la Libertad Religiosa 2009
Proclama por el Presidente de Estados Unidos de Norteamérica
La libertad religiosa es la base de una sociedad saludable
y llena de esperanza. En el Día de la Libertad Religiosa,
reconocemos la importancia de la promulgación, en
1786, del Estatuto de Virginia sobre Libertad Religiosa.
También celebramos las primeras libertades protegidas
por la Declaración de Derechos Civiles de nuestra
Constitución, que garantiza el libre ejercicio de
la religión para todos los estadounidenses y prohíbe
la designación de una religión oficial.
Nuestra nación fue fundada por gente que necesitaba
un refugio para escapar de la persecución religiosa,
y la libertad de credo que encontraron aquí sigue
siendo una de las grandes ventajas de este país.
Como estadounidenses, creemos que todas las personas tienen
dignidad y valía inherentes. Aunque profesemos diversos
credos y practiquemos nuestra religión de maneras
y en lugares diferentes, respetamos mutuamente la humanidad
de los demás y la forma en que expresan su fe. Personas
con diferentes puntos de vista pueden practicar su religión
aquí y, al mismo tiempo, vivir en paz y armonía,
siguiendo la noble tradición de libertad religiosa
de nuestro país.
Estados Unidos también apoya a los disidentes religiosos
y a los creyentes de todo el mundo que practican su religión
en paz. La libertad no es una concesión otorgada
por el gobierno ni el derecho exclusivo de los estadounidenses;
es el derecho natural de todo hombre, mujer y niño
en el mundo. No hay libertad humana más importante
que el derecho de practicar nuestra religión según
los dictados de nuestra conciencia.
El Día de la Libertad Religiosa es una oportunidad
para celebrar nuestro legado que nos hace libres de practicar
nuestra religión, promover una cultura de tolerancia
y paz, y renovar nuestro compromiso para asegurar que todas
las personas en la Tierra puedan disfrutar de estos derechos
humanos fundamentales.
AHORA POR TANTO, YO, GEORGE W. BUSH, Presidente de los
Estados Unidos de Norteamérica, en virtud de la autoridad
que me conceden la Constitución y las leyes de Estados
Unidos, por la presente proclamo el 16 de enero de 2009
como el Día de la Libertad Religiosa. Hago un llamado
a todos los estadounidenses para que reflexionen sobre el
grandioso don de la libertad de credo, y que procuren preservar
esta libertad para futuras generaciones y conmemoren este
día con eventos y actividades apropiados.
EN FE DE LO CUAL, suscribo la presente este decimosexto
día de enero del año de Nuestro Señor
dos mil nueve, y ducentésimo trigésimo tercero
de la Independencia de Estados Unidos de Norteamérica.
GEORGE W. BUSH
(termina el texto)
###