El Presidente George W. Bush y el Presidente Tabaré Vázquez en conferencia de prensa en el Parque Anchorena, el 10 de marzo de 2007. |
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El Presidente George W. Bush y el Presidente Tabaré Vázquez caminan por el predio de la Estancia Anchorena. |
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El Presidente George W. Bush y el Presidente Tabaré Vázquez se dan la mano luego de la conferencia de prensa en el Parque Anchorena. El Presidente Bush se comprometió a mejorar el ingreso de productos uruguayos a los EE.UU. y también se comprometió a implementar una nueva Ley de Inmigración que permita el ingreso de extranjeros en mejores condiciones a su país. |
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Parque Anchorena
10 de marzo de 2007
11:53 A.M.
AUDIO VIDEO
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Señor
Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica,
señora Secretaria de Estado, señores integrantes
de la delegación que nos visita, señores Ministros
de Estado, señor Embajador de los Estados Unidos
de Norte América en Uruguay, señor Embajador
de Uruguay en los Estados Unidos de Norteamérica,
señoras y señores Periodistas, señor
Presidente, quiero presentar a usted nuestro saludo de bienvenida
junto a la prestigiosa delegación que lo acompaña.
Usted representa, señor Presidente,
a un pueblo que es amigo del pueblo uruguayo. Históricas
relaciones amistosas unen a estos dos países, a estos
dos pueblos. Relaciones firmes, respetuosas y solidarias;
y al respecto quisiera ejemplificar con dos elementos que
me parecen que son altamente significativos.
El primero de ellos, señor Presidente,
miles de ciudadanos uruguayos viven en los Estados Unidos
de Norteamérica y han encontrado en ese país
condiciones de vida que no tenían en el nuestro y
que los obligaron a emigrar, pudieron establecerse, formar
sus familias, tener trabajo, estudiar, dar educación
a sus hijos, salud. Por lo tanto, creo que este es un elemento
claro que el pueblo norteamericano ha tendido como mano
al pueblo uruguayo.
Seguramente hay muchos uruguayos que estarán
en situación de aún legalizar su situación
en aquel país, pero estamos seguros que esa solidaridad
abrirá caminos posibles para que nuestros conciudadanos
puedan legalmente habitar este país.
Y el segundo ejemplo que quiero dar es ni
más ni menos -que los uruguayos lo recordamos muy
bien- cuando nuestro país vive la crisis económica
más brutal de su historia. Cuando Uruguay estaba
viviendo una situación económica y social
realmente conmocionante y grave para nuestro país,
fue precisamente vuestro país -y en particular, usted
señor Presidente-, quién tendió la
mano para lograr, para ayudar a que Uruguay saliera de ese
pozo en el que se encontraba y comenzará un camino
de recuperación que hoy estamos tratando de consolidar.
Hace 16 años y monedas visitaba el
país otro Presidente de los Estados Unidos, fue un
cinco de diciembre de 1990, ese Presidente era su señor
padre. Yo era en aquel momento Intendente Municipal de Montevideo
y me tocó entregarle las llaves de la ciudad de Montevideo.
Tuvimos un breve intercambio con el Señor Presidente
Bush padre, y en aquel momento recuerdo una de sus frases
cuando dijo: "dejemos de lado nuestras diferencias
-que las tenemos- y transitemos por el camino de las concordancias
y del encuentro en las coincidencias, que también
las tenemos".
La defensa de la democracia como organización
y funcionamiento de nuestras sociedades pero más
que ello como estilo de vida, la defensa de las libertades
y el luchar permanente para mejorar las condiciones de vida
de nuestra gente dándole trabajo, educación
y salud son elementos comunes que nos permiten augurar que
podemos trabajar juntos más allá de nuestras
diferencias, señor Presidente.
Así, que con estas palabras quiero
explicitar que el camino que hemos seguido y que hoy hemos
dialogado con el Señor Presidente de los Estados
Unidos, ha sido precisamente ese: el de buscar incrementar
nuestro intercambio comercial, la posibilidad de aumentar
la colocación de nuestro trabajo en el mercado de
los Estados Unidos de Norteamérica, buscar aumentar
el intercambio científico, tecnológico, cultural
con el país hermano y ver la forma de juntos lograr
una mejor calidad de vida para nuestra gente.
Señor Presidente, señores
integrantes de su delegación les deseo que aquí
se encuentren como en su propia casa.
Bienvenidos.
PRESIDENTE BUSH: Gracias, Señor Presidente.
Me siento muy en casa aquí. ¿Saben? Es. En
mi estado de Texas, cuando uno invita a alguien a su estancia,
es una señal de respeto. Y muchísimas gracias
por el cálido gesto de hospitalidad. Al fin y al
cabo, es usted tejano. (Risas.)
Hemos tenido. éste es nuestro segundo
diálogo significativo. Recuerdo muy bien su visita
a la Oficina Oval. Fue muy elocuente sobre su deseo de mejorar
la vida de la gente en su país. Me impresionó
entonces su compasión y su preocupación.
Esperaba ver un país hermoso cuando
vine aquí, y eso es precisamente lo que he visto.
Su capital es espléndida. La arquitectura es realmente
bella. Y luego, por supuesto, venimos a este bello lugar
que es tan pacífico y me recuerda los fabulosos recursos
naturales que tiene su país.
Hablamos sobre muchos temas. En primer lugar,
señor Presidente, estoy completamente de acuerdo
con el espíritu de nuestras conversaciones, que encontraremos
terreno común y promoveremos ese terreno común
para beneficio de nuestros pueblos respectivos.
Un campo que tenemos en común es
el respeto de los derechos humanos y la dignidad humana,
el respeto por el imperio de la ley; apreciamos la existencia
de una prensa libre. la mayoría del tiempo. (Risas.)
No, todo el tiempo. Respetamos las elecciones. Y Uruguay
es un buen ejemplo de la estabilidad que puede surgir de
la democracia. Pero también reconocen lo que yo reconozco,
que no se debe dar por descontada a la democracia, que la
gente debe ver beneficios tangibles.
Y, entonces, en mi viaje a Sudamérica
y Centroamérica, deseo recordarle a la gente que
Estados Unidos y su pueblo compasivo se interesan profundamente
en asuntos como la educación y salud, asuntos que
a ustedes les interesan. Dedicamos mucho tiempo a hablar
sobre la educación, y supongo que la mayoría
de los estadounidenses no saben que participamos activamente
en ayudar al Presidente a instituir un programa para que
los niños aprendan a leer y escribir mejor, particularmente
en inglés. Queremos continuar ayudando.
Dedicamos un tiempo a hablar sobre maneras
en que podemos intercambiar estudiantes en una. de mejor
manera. Hablamos sobre el intercambio de ideas, que nuestros
expertos se sienten ante la misma mesa para tratar asuntos
como los combustibles alternativos. En mi viaje a Brasil
ayer dedicamos tiempo a hablar acerca de combustibles alternativos
y la necesidad de que Estados Unidos y Brasil trabajen juntos.
Es la misma conversación que tuvimos en Uruguay.
Hablamos sobre el hecho que. o por lo menos
yo hablé sobre el hecho. el Presidente es un hombre
modesto, pero yo hablé sobre el hecho que la economía
uruguaya está creciendo. aproximadamente 7 por ciento.
Y lo felicito, señor, por crear las condiciones para
que la gente se sienta cómoda haciendo inversiones
que causan que las economías crezcan, y que queremos
trabajar juntos para continuar el progreso que hemos alcanzado
en el comercio e inversión a un paso con el que nuestros
pueblos se sientan cómodos.
Deseo agradecerle muchísimo por su
compromiso con la democracia y paz en nuestra región.
Lo felicito a usted y al pueblo del Uruguay por proporcionar
a Haití y Congo personal para las operaciones de
mantenimiento de la paz. Es señal de la fortaleza
de una nación hacer un esfuerzo por ayudar a los
demás a obtener los beneficios de una sociedad libre.
Y usted envió un mensaje enérgico y poderoso.
Finalmente, quiero decir algo acerca de
la inmigración en Estados Unidos. El Presidente me
ha hablado elocuentemente sobre la necesidad de que exista
una política de inmigración que respete los
valores de Estados Unidos. Le expliqué que estoy
interesado en que el Congreso de los Estados Unidos apruebe
una ley integral de inmigración lo antes posible.
Estoy deseoso de trabajar tanto con republicanos como demócratas,
señor Presidente, para hacer lo que se debe para
respetar las leyes de Estados Unidos, pero a la vez, reconocer,
que por un lado, no podemos otorgar la ciudadanía
automática, y por el otro lado, no podemos echar
a la gente. Y, entonces, por lo tanto, es necesario que
haya un camino racional por delante.
Y le prometo a usted, un hombre que se interesa
por la gente de su país que pueda estar viviendo
en Estados Unidos, que trabajaré lo más arduamente
posible para lograr una ley de inmigración compasiva
y racional que respete las leyes, pero que también
respete las grandes tradiciones de Estados Unidos, la tradición
de una sociedad acogedora; una tradición que dice
que recibimos con beneplácito nuestra diversidad
porque creemos que en nuestra diversidad podemos encontrar
la fortaleza de nuestra nación.
Y, entonces, he estado. realmente he estado
deseoso de hacer este viaje. Tengo especiales ganas de probar
el asado. Agradezco la. Agradezco su voluntad de cocinar
carne uruguaya. Siempre me ha dicho lo buena que es, y después
de contestar unas cuantas preguntas, nos daremos cuenta
de ello.
Entonces, señor Presidente, gracias
por su hospitalidad.
P La pregunta va dirigida al Presidente
George Bush. Teniendo en cuenta el contexto regional, que
nos encontramos gobernados por mandatarios como Vázquez.
Chávez. ¿qué diferencias y similitudes
encuentra usted entre ellos y qué opinión
tiene usted respecto al Presidente Vázquez y Uruguay?
PRESIDENTE BUSH: La tentación es
tratar de hacer que la gente hable sobre sus diferencias.
Quiero hablar sobre nuestras coincidencias. Compartimos
un respeto mutuo. Respetamos nuestros países, respetamos
nuestra historia y tradiciones y compartimos un gran respeto
por un gobierno que. donde el pueblo decide quién
está a cargo.
Lo interesante es que ambos nos libramos
de poderes coloniales en nuestro pasado y es. Considero
que es ese patrimonio el que hace de Uruguay y Estados Unidos
aliados tan naturales. Hablamos sobre la necesidad de invertir
y hacer que las economías crezcan por medio de la
inversión. Ése es terreno común que
resulta en una relación positiva.
Ambos reconocemos que la educación
es vital para el éxito de nuestros respectivos países.
Cuando descubrimos analfabetismo en Estados Unidos, a menudo
es allí donde encontramos pobreza. Y, por lo tanto,
la política de educación se concentra en mejorar
la vida de todos al dotar a la gente de los conocimientos
necesarios para competir en el siglo XXI.
Creo que mucha gente en mi país no
sabe que Uruguay es el principal exportador de software
en Sudamérica. Significa que uno de los grandes puntos
positivos de su país es la capacidad intelectual
del país. A menudo cuando uno piensa en un país
como Uruguay, piensa en los recursos naturales -granjas
fantásticas, muchas vacas y ovejas, y moras azules-
que, por cierto, fueron mencionadas en nuestra conversación
de hoy. Pero creo que es alentador que nuestros países
sepan que un amigo es un exportador importante de algo que
requiere de la creatividad y capacidad intelectual de sus
ciudadanos. Y, entonces, encontramos terreno común
allí sobre cómo trabajar juntos.
Ésta es una. Diría que esta
reunión es muy constructiva y muy prometedora y muy
positiva. Y se debe a que tenemos tanto en común.
Es mucho más lo que nos une que lo que nos divide,
señor Presidente, y agradezco la oportunidad de conversar
con usted.
Tony.
P Presidente Bush.
PRESIDENTE BUSH: Bret Baier. El hombre.Tengo
60 años y cree que no oigo. (Risas.)
P Lo siento. Señor Presidente, la
FBI reconoció que algunos agentes usaron facultades
posteriores al 11 de septiembre para exigir información
personal sobre estadounidenses. ¿Qué le dice
a la gente que se preocupa por el uso de estas cartas de
seguridad nacional? Y considerando la manera en que se usaron
esas cartas, aún confía en el fiscal general
Gonzáles y el director de la FBI Mueller?
PRESIDENTE BUSH: El fiscal general y el
director de la FBI me presentaron un informe sobre este
tema la semana pasada. Le dedicamos mucho tiempo a hablar
sobre el informe del inspector general (IG). En primer lugar,
deseo felicitar al IG por una buena y necesaria labor. Me
informaron de las conclusiones de su meticuloso trabajo.
Mi pregunta es, ¿qué van a hacer para resolver
el problema y cuán pronto pueden resolverlo?
Y me complació la respuesta del director
Mueller, que ya había comenzado a hacerles frente
a algunos de los problemas, pero que queda más trabajo
por hacer. Pienso que su testimonio del otro día
fue muy bueno; asumió la responsabilidad, como debe
ser. Y tengo confianza en el director Mueller, como también
en el fiscal general.
Deseo recordarle, Bret, y a otros, que el
informe del IG objetó diligentemente las deficiencias
de la FBI; también dejó en claro que estas
cartas eran importantes para la seguridad de Estados Unidos.
Y, entonces, abordaremos los problemas en el informe, y
se lidiará con estos problemas lo antes posible.
P Buenas tardes. La primera pregunta va
para el Presidente Bush. Usted reconoció las trabas
proteccionistas que existen en su gobierno. ¿Qué
tan flexible puede ser su gobierno a la hora de avanzar
en algún acuerdo comercial con Uruguay y a qué
acuerdos concretos se llegaron en el día de hoy?
Y la segunda pregunta que es para ambos
mandatarios, Presidente Vázquez, usted solicitó
al Presidente Bush interceder en las diferencias que actualmente
mantiene Uruguay con Argentina.?
PRESIDENTE BUSH: Le dedicamos mucho tiempo
a abordar las inquietudes de Uruguay sobre el acceso al
mercado de ciertos productos. El Presidente habló
sobre una variedad de asuntos con respecto al comercio.
Consideraba que las cuotas en ciertos artículos,
como vacas y ovejas, no eran justas, y le dije que de todos
modos consideraríamos las solicitudes que hizo.
Pensaron que estaba haciendo una broma sobre
moras azules, pero no fue así. Resulta que Uruguay
produce moras azules fabulosas. Y la pregunta fundamental
es, ¿esa mora azul. el cultivador de moras azules
podrá vender el producto en Estados Unidos?
Así que hablamos sobre una variedad
de cosechas. Y le dije al Presidente, dije, no es posible
resolver los problemas a no ser que se pongan los problemas
sobre la mesa, y que si podíamos ayudar, ayudaríamos,
y cuando no pudiéramos, les ofrecería una
explicación de por qué no se pudo.
Ahora, usted mencionó las tendencias
proteccionistas, y me preocupan las tendencias proteccionistas,
no sólo con nuestro propio país, sino alrededor
del mundo. Creo que un mundo que comercia libre y equitativamente
es un mundo que tiene mayores posibilidades de hacerle frente
la pobreza. Y por lo tanto, soy un firme partidario de completar
la Rueda de Doha con la OMC.
Compartí con el Presidente nuestras
estrategias para hacer que la Rueda de Doha avance. Pasé
mucho tiempo con el Presidente Lula conversando de esto.
estuvo muy interesado en nuestras conversaciones, y compartí
lo que conversamos. No divulgué ningún secreto,
por supuesto, pero le dije que necesitamos hacer que la
Rueda de Doha avance. Estados Unidos está plenamente
preparado a reducir los subsidios agrícolas, como
le expliqué al Presidente. Simplemente queremos asegurarnos
de que haya acceso al mercado para nuestros productos. Y
eso es lo que le dije al Presidente Lula, eso es lo que
les dije a los europeos y eso es lo que compartí
con el Presidente.
Me siento optimista de que podemos lograr
mucho. Es más, nuestra ministra de comercio está.
Susan Schwab se quedó en São Paulo para hablar
con su colega brasileño, todo con el propósito
de continuar progresando hacia lo que es un acuerdo complicado,
pero necesario.
Gracias.
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Como respuesta
a su primera pregunta, por cierto coincido totalmente con
lo expresado por el señor Presidente de los Estados
Unidos. Quiero decir que hemos creado un espacio a partir
de esta reunión, donde nuestros técnicos,
nuestros ministros podrán conversar y avanzar en
distintos temas vinculados al relacionamiento bilateral.
En lo que respecta a la situación
general multilateral, Uruguay ha planteado su posición
en cuanto a defender el libre comercio y buscar la caída
de los aranceles y subsidios, que dificultan muchas veces
la colocación de sobre todo nuestros productos agropecuarios.
Pero hemos podido analizar la posibilidad de avanzar por
el sistema nacional de preferencias en algunos temas que
seguramente van a ser estudiados en las próximas
semanas.
En cuanto a la segunda parte de su pregunta,
no he planteado el tema del diferendo que tenemos con la
república de Argentina al señor Presidente
de los Estados Unidos, entre otras cosas, porque dentro
de pocos días, en algunas semanas, por la gestión
de Su Majestad, el Rey de España, se acercarán
a dialogar -no a negociar, porque no vamos a negociar mientras
los puentes estén cortados, pero sí a dialogar
entre los dos gobiernos- para buscar una forma amistosa,
por el camino del entendimiento, del razonamiento, para
solucionar este triste diferendo que tenemos con nuestros
hermanos argentinos.
P Gracias, señor Presidente y señor
Presidente. Para el Presidente Bush, Hugo Chávez
sugirió que usted teme mencionar su nombre. Entonces,
¿teme hacerlo? Y ¿en qué grado es él
una amenaza para los intereses de Estados Unidos en el hemisferio?
Y, Presidente Vázquez, ¿puede
usted hablar sobre su postura entre tratar de ampliar los
vínculos con Estados Unidos en términos del
comercio, sino también indicarles a sus otros vecinos
que usted. permanece integrado en el comercio sudamericano?
PRESIDENTE BUSH: He venido a Sudamérica
y Centroamérica para promover una diplomacia positiva,
constructiva que está llevando a cabo mi gobierno
en nombre del pueblo estadounidense.
Mi mensaje a la gente de nuestra región
es que nos preocupa la condición humana y que creemos
que es posible mejorar la condición humana de una
variedad de maneras. primero, la inversión. Y, entonces,
el asunto es, ¿cómo podemos sostener un diálogo
constructivo con nuestros vecinos sobre cómo propagar
los beneficios de la inversión?
También le estoy recordando a la
gente que el contribuyente estadounidense es muy generoso
cuando se trata de ayuda bilateral. Desde que soy Presidente,
hemos doblado la cantidad de ayuda bilateral anual a América
Latina de $800 millones al año a $1,600 millones
al año. Y la mayoría del dinero está
dirigido a programas de justicia social, programas como
educación y atención de salud.
También tengo muy presente que -y
lo vi yo mismo en São Paulo- que muchas organizaciones
no gubernamentales y grupos basados en la fe y personas
estadounidenses expresan su preocupación sobre la
situación apremiante de los pobres por medio de programas
y actividades dirigidas a darle a la gente una oportunidad.
Ayer en São Paulo fuimos a un vecindario bastante
acaudalado, pero estaba rodeado por una favela. Y allí
encontramos en medio de la desesperanza, que había
un pequeño centro de amor. Y parte del dinero del
programa había sido recaudado como resultado de conciertos
en Estados Unidos, donde ciudadanos, ciudadanos comunes
y corrientes, contribuyen para asegurarse de que este programa
siga siendo viable.
Y, entonces, el viaje es una declaración
del deseo de trabajar juntos con la gente de nuestra región.
He estado en Centroamérica y Sudamérica muchas
veces durante mi presidencia, porque comprendo plenamente
que a Estados Unidos de Norteamérica le conviene
una región próspera y pacífica.
Describiría nuestra diplomacia como
una diplomacia silenciosa y eficaz. diplomacia dirigida
a ayudar a la gente, dirigida a mejorar la condición
humana, dirigida a expresar la gran compasión del
pueblo estadounidense.
Y, señor Presidente, le agradezco
que me haya dado la oportunidad de venir a hablar con usted,
de sostener un diálogo sobre las maneras en que podemos
promover nuestros intereses y los intereses de nuestra región.
PRESIDENTE VÁZQUEZ: Bien, con respecto
a su pregunta, la estrategia para la inserción internacional
de Uruguay, que está bien definida y creo que bien
clara. Es decir, apostamos a un proceso de integración
abierta, es decir, apostamos fuertemente al proceso de integración
regional.
Uruguay está donde está y
no se puede ir. Además no nos queremos ir de acá,
y por cierto el comercio que mantenemos y las relaciones
culturales históricas que mantenemos con nuestros
hermanos países de la región son muy sólidas
y son muy fuertes. Pero no queremos un proceso de integración
cerrado sino un proceso de integración abierto, que
este MERCOSUR se pueda integrar con otros bloques, o con
otros países del mundo, pero también que cada
uno de los integrantes de este proceso, por ejemplo Uruguay,
pueda ejercer su derecho soberano de desarrollar relaciones
bilaterales con otros procesos de integración u otros
países. En ese sentido, estamos trabajando, y en
ese sentido se inscribe entonces esta reunión que
tuviéramos el honor de tener con el señor
Presidente de los Estados Unidos.
Gracias, señor presidente.
END 12:18 P.M. (Local)
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