El presidente Obama habla con la prensa el 27 de enero, entre sesiones de las negociaciones con líderes del Congreso.

Washington — A pedido urgente del presidente Obama la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el 28 de enero un proyecto de ley d un paquete de estímulo económico por 819.000 millones de dólares, que asigna importante cantidad de recursos para la educación.

La legislación que todavía debe ser votada por el Senado en Pleno se conoce como Ley para Recuperación y Reinversión de Estados Unidos 2009, la comisión de Asignaciones del Senado ya ha aprobado las provisiones para la educación, de manera similar a la versión de la Cámara de Representantes. Obama expresó su optimismo de que el paquete entero le sea enviado para su firma, antes que el Congreso comience su receso a mediados de febrero.

El proyecto de ley, que tiene 647 páginas, aumentaría la ayuda de préstamos a estudiantes, daría créditos tributarios para educación superior, asignaría miles de millones de dólares a la reparación y renovación de los campus universitarios e instalaciones de investigación, y aumentaría mucho el financiamiento para la investigación por medio de agencias como el Departamento de Recursos Energéticos, la Fundación Nacional de Ciencias y los Institutos Nacionales de la Salud.

Ningún republicano votó a favor de la medida, que fue aprobada por 244 contra 188 votos, 11 demócratas votaron en contra del proyecto de ley. Los republicanos objetan la inclusión de gastos de educación en el proyecto de ley de estímulo económico, afirmando que habitualmente esos proyectos de ley se limitan a proyectos como carreteras y puentes, y que el gasto en educación entra en vigor muy lentamente, como para tener impacto en una recesión. Los observadores no partidistas en general esperan que casi todo el dinero para educación sea pare del paquete final que emerja del proceso legislativo.

En su discurso inaugural, el 20 de enero, Obama pidió a los estadounidenses “comenzar de nuevo la tarea de rehacer a Estados Unidos”.

Su administración procederá “no solamente para aumentar nuevos puestos de trabajo, sino que a crear nuevas bases para el crecimiento”. Además de construir nuevas carreteras, puentes, redes eléctricas y líneas digitales, Obama se comprometió “a transformar nuestras escuelas, colegios y universidades, para cumplir con las exigencias de una nueva era”.

En su discurso semanal, el 24 de enero, el presidente explicó su compromiso de financiar la educación. “Para asegurar que nuestros niños puedan competir y triunfar en esta nueva economía renovaremos y modernizaremos 10.000 escuelas, construyendo aulas más modernas, bibliotecas y laboratorios para mejorar el aprendizaje de más de 5 millones de estudiantes. Invertiremos más en donaciones Pell para hacer que el colegio universitario esté al alcance de otros 7 millones de estudiantes, daremos un crédito tributario de 2.500 dólares para el colegio universitario a 4 millones de estudiantes y triplicaremos la cantidad de becas en ciencias para impulsar a la próxima generación de innovadores”, aseveró.

Millones dólares serían para investigación en los Institutos Nacionales de la Salud, y en otras agencias.

En el año 2008, alrededor de 5,6 millones de estudiantes recibieron donaciones Pell, por un total de16.400 millones de dólares, de acuerdo con lo que informa el Departamento de Educación de Estados Unidos. Esas concesiones federales, que llevan el nombre de Clairborne Pell, ex-senador de Estados Unidos, que fue autor de la ley original en la década de 1960, les permite a los estudiantes procedentes de familias de bajos recursos asistir a los colegios universitarios, y no se tienen que pagar como ocurre con los préstamos.

Los educadores han aplaudido la inclusión de dinero para educación en el paquete de emergencia. Molly Corbett Broad, presidenta del Consejo de Educación de Estados Unidos, dijo que la propuesta “combina con maestría el estímulo económico a corto plazo con la inversión a largo plazo en el capital humano de nuestra nación, en la capacidad para investigar y en la infraestructura física”.

El aumento en el valor máximo de la donación Pell, y el aumento de financiamiento para instalaciones de investigación, “mejorarán la capacidad de innovar y ayudarán mucho en el entrenamiento de la fuerza laboral que Estados Unidos necesita para recuperarse de la actual baja económica”, dijo Broad.

Anne L. Bryant, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Juntas Escolares, también aplaudió la propuesta de Obama. “Estamos muy alentados por los montos propuestos de inversión y ayuda incluidos en la descripción del estímulo divulgada hoy”, dijo Bryant. “La ley propuesta daría recursos oportunos para ayudar a restaurar la inversión federal en la educación como el motor económico de la recuperación a largo plazo, sostenibilidad y competividad mundial”.

Los comentaristas han citado distintas cifras en dólares, en la porción de los 819.000 millones de dólares destinada a la educación, las notas de prensa colocan la suma en unos 120.000 millones de dólares, cuando los rubros como los 6.000 millones de dólares para el despliegue de la banda ancha no son contados. Pero los educadores, que conocen las desventajas de los estudiantes de las áreas rurales tienen en los cursos en línea electrónica cuando carecen de acceso de alta velocidad a Internet. Los educadores consideran también que los más de 80.000 millones de dólares en ayuda federal para Medicaid no sólo son un alivio para el frente de la salud, sino también reduce la competencia por los limitados dólares que los estados tienen para Medicaid y educación.

Cuando esos rubros se incluyen, casi 200.000 millones de dólares de la Cámara de Representantes tienen que ver con educación, describió Dan Domenech, director ejecutivo de la Asociación de Administración de Escuelas (AASA), en una carta del 16 enero dirigida a los miembros de AASA Domenech señaló que las principales características relacionadas con la educación, incluso las donaciones para estudiantes desaventajados, educación especial, educación para niños sin hogar, calidad de los maestros, reparación y modernización de la infraestructura, tecnología educativa y fondos para la estabilización de emergencia para los distritos que enfrentan graves problemas operacionales a causa de la recesión.

La propuesta incluye también 200.000 millones de dólares para el pago por mérito a los maestros, un concepto popular entre los Republicanos, que tiene el apoyo de Obama, es poco popular entre los sindicatos de maestros.

En su carta a los miembros de AASA Domenech dice que además de los casi 200.000 millones, la Cámara de Representantes está trabajando en la porción de impuestos del paquete de recuperación económica que se espera incluyan 22.000 millones de dólares en créditos tributarios para bonos de construcción de escuelas.

Pero el Senado de Estados Unidos también tiene su criterio en torno al paquete final de estímulo. Una vez que el Senado haya debatido, y aprobado su propia versión, las versiones de la Cámara de Representantes y del Senado deben ser reconciliadas para elaborar una versión final que sea aprobada por ambas cámaras y pueda ser enviada al presidente para la promulgación de la ley.

Para más información, en inglés, ver en el sitio de la Casa Blanca en la web.

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