El Presidente George W. Bush proclama Dìa
de la Recordación
Rinde homenaje a hèroes militares
de E.U.
28 de mayo de 2004
El presidente Bush proclamó
el Dìa de la Recordación, 31 de mayo de 2004,
como un "dìa de oración por la paz permanente".
En reconocimiento a los veteranos, a los
"mas de un millón de estadounidenses que han
muerto por preservar nuestra libertad, a los mas de 140.000
ciudadanos que fueron prisioneros de guerra y a todos aquellos
que fue declarados desaparecidos en combate", dijo
el presidente.
A continuación una traducción
extraoficial del texto difundido por la Casa Blanca: "Desde
las primeras batallas de la Revolución Estadounidense
a la convulsión de la Guerra Civil, la Primera Guerra
Mundial, la Segunda Guerra Mundial, Corea y Vietnam, el
Golfo Persico y las operaciones de hoy en la guerra contra
el terrorismo en Afganistàn e Iraq y en todo el mundo,
los miembros de nuestra fuerza militar han establecido una
tradición de servicio honorable y leal".
Bush emitió una proclama que pide
a cada ciudadano estadounidense "unirse en oración"
a las 11 a.m. y observar el Momento Nacional del Recuerdo
a las 3.00 p.m. del D¡a de la Recordación,
31 de mayo, como muestra de respeto a los soldados caìdos,
a su consagración a nuestro paìs y a su legado
de patriotismo y sacrificio"
A continuación una traducción
extraoficial de la proclama distribuida por la Casa Blanca:
(comienza el texto)
La Casa Blanca
Oficina del Secretario de Prensa
27 de mayo de 2004
Oración por la paz, Dìa
de la Recordación, 2004
PROCLAMA DEL PRESIDENTE DE LOS ESTADOS
UNIDOS DE AMERICA
Durante mas de dos siglos los estadounidenses
han sido llamados a defender los ideales de nuestra democracia.
En el Dìa de la Recordación, la nación
agradecida recuerda a los magn¡ficos patriotas que
hicieron el sacrificio supremo en defensa de los beneficios
de la libertad.
Desde las primeras batallas de la Revolución
Estadounidense a la convulsión de la Guerra Civil,
la Primera Guerra Mundial, la Segunda Guerra Mundial, Corea
y Vietnam, el Golfo Pèrsico y las operaciones de
hoy en la guerra contra el terrorismo en Afganistàn
e Iraq y en todo el mundo, los miembros de nuestra fuerza
militar han establecido una tradición de servicio
honorable y leal. Al celebrar el Dìa de la Recordación
rendimos homenaje a los m s de un millón de estadounidenses
que han muerto por preservar nuestra libertad, a los màs
de 140.000 ciudadanos que fueron prisioneros de guerra y
a todos aquellos que fueron declarados desaparecidos en
combate. Tambièn rendimos homenaje a nuestros veteranos
por su entrega y su sacrificio a Estados Unidos.
Este año rendimos homenaje a los
muchos hèroes al recordar el 60 mo. aniversario del
Dìa D en las playas de Normandìa, y con la
inauguración del Monumento Nacional de la Segunda
Guerra Mundial en Washington DC. En un mensaje radial del
6 de junio de 1944 el presidente Franklin Roosevelt calificó
a esos miembros del servicio de "orgullo de nuestra
nación", que combatieron en defensa de nuestra
civilización. Los caìdos en ese fatìdico
dìa y en esa guerra seràn siempre recordados.
Ellos tienen un lugar especial en la historia de Estados
Unidos y en la memoria de los pueblos que liberaron.
Hoy todos los que lucen el uniforme de Estados
Unidos sirven en un momento crucial en la historia, y cada
uno ha respondido a un gran llamado para servir a nuestra
Naciòn en las lìneas frontales de la libertad.
Mientras seguimos combatiendo el terrorismo e impulsando
la paz y la libertad, oremos por la seguridad y la fuerza
de nuestras tropas, para que Dios los bendiga a ellas y
sus familiares, y a aquellos que han perdido a sus seres
queridos.
En este Dìa de la Recordaciòn
nosotros rendimos homenaje a todos nuestros soldados caìdos,
su consagraciòn a nuestro paìs y su legado
de patriotismo y sacrificio. Al dar su vida por la causa
de la libertad, esos hèroes han protegido e inspirado
a todos los estadounidenses.
En respeto a su entrega a Estados Unidos,
el Congreso, en una resoluciòn conjunta aprobada
el 11 de mayo de 1950, tal como ha sido (64 Stat. 158),
le ha pedido al presidente que emita una proclama para pedir
al pueblo de Estados Unidos que observe cada D¡a de
la Recordación como una jornada de oración
en favor de la paz permanente, y que designe un perìodo
del dìa para que el pueblo de Estados Unidos se una
en la oración. El Congreso, por la Ley Pùblica
106-579 tambièn designó el minuto que comienza
a las 3:00 p.m., hora local de ese dìa, como el instante
para que todos los estadounidenses observen el Momento Nacional
de la Rememoración.
POR TANTO, YO, GEORGE W. BUSH, presidente
de los Estados Unidos de Amèrica, proclamo por la
presente el 31 de mayo de 2004 Dìa de la Recordación,
como una jornada de oración por la paz permanente
y designo la hora que comienza en cada localidad a las 11:00
a.m. de ese dìa para unirse en oración. Pido
a todos los estadounidenses que observen el Momento Nacional
del Recuerdo a partir de las 3:00 p.m., hora local en el
Dìa de la Recordación. Urjo a la prensa, la
radio, la televisión y todos los demàs medios
a participar en esas ceremonias.
Tambièn pido a los gobernadores de
Estados Unidos y del Estado Libre Asociado de Puerto Rico,
a las autoridades apropiadas de todas las unidades del gobierno,
que ordenen que la bandera se ice a media asta hasta el
mediodìa de este Dìa de Recordación
en todos los edificios, terrenos y embarcaciones navales
de todo Estados Unidos, y en todas las reas bajo su jurisdicción
y control. Tambièn pido al pueblo de Estados Unidos
desplegar la bandera a media asta en sus hogares por el
perìodo señalado antes del mediodìa.
EN FE DE LO CUAL, firmo en este vigèsimo
sexto dìa de mayo, del año de Nuestro Señor
dos mil cuatro, y el 228vo. de la independencia de los Estados
Unidos de Amèrica.